Creo que no relaté la vez que me robaron el estéreo del carro... Fue el año pasado. En resumidas cuentas: fui a comprar mi boleto de autobús para regresar de DF a Mty el dormingo 2 de enero, porque el 31 tenía planeado caer de sorpresa a mi casa. Estacioné el carro en una avenida que me dio la suficiente confianza; regresé y la alarma ya había decidido callarse (creo que eso sucede cuando lleva mucho tiempo sonando), solo parpadeaban las luces. Una cuadra antes de llegar al carro fue evidente que me habían vandaleado. Me subí, arranqué, y a los pocos minutos vi que ya no tenía estéreo, la ventanilla del copiloto estaba hasta abajo, la clásica aleta trasera estaba quitada, y la ensalada que llevaba para cenar ya tampoco estaba. Eso fue yo calculo que a mediados de diciembre.
Hoy relataré, además, lo que me pasó hace rato cuando dos individuos en un jetta color azul oscuro intentaron vandalearme (o sí me vandalearon, pero sin nada que lamentar?) en el estacionamiento del supermercado más cercano a mi oficina que no abre las 24 horas. Salí de echar la cáscara y fui al para allá. Estacioné, me metí al supermercado, fui al baño (por cierto, me metí, por tercera vez en mi vida, al baño de mujeres, según yo, sin querer), saqué unos millones del cajero y quise aprovechar para comprar agua y una ensalada. Escogí las cosas, me formé en la fila express (no recuerdo el nombre exacto, eso no es lo importante ahorita), me di cuenta que no pesé la ensalada y regresé a hacerlo; de vuelta en la caja, pagué y agarré camino a la salida. A unos 50 metros del coche volteé hacia donde recordé lo había dejado, una camioneta me estorbaba y no lo vi, solo vi un jetta junto. Ya me iba a otra fila cuando me dije a mí mismo que el coche sí estaba hacia donde vi primero, entonces me moví unos metros y ya alcancé a verlo, cuando de pronto vi que un tipo abrió la cajuela, pensé: NO-ME-A-MES! Ese es mi coche! Inmediatamente empezó a sonar la alarma, se prendieron los focos de las calaveras (esas góticas que tengo en el parabrisas trasero, son la onda por cierto, naaat!), un individuo parado del lado del chofer del jetta con la puerta abierta (ahhh, mi coche estaba de frente al camellonsito que delimita las filas de vehículos, o sea, tenía que salir en reversa, el jetta estaba al revés, podían salir de frente, con lo cuál, el lado del chofer era el más cercano a mi coche) le da un golpesito al otro, este se mueve, sube al jetta, y se van. En ese momento no entendía si lo acababan de abrir o qué pedo, mi primer pensamiento fue: Hijos de dama de burdel, acaban de robarse mi bomba de aire que tenía en la cajuela! (no, eso no, sino mi compu). Sentí que emprendieron la huida al verme, aunque después que lo pienso definitivamente pudo haber sido por la alarma. Me caga que no la hice de pedo, me hubiera gustado romperme la madre con esos dos hijos de puta, pero me caga porque en estos tiempos uno ya no puede andar por la calle mentando madres y haciéndola de pedo porque cualquier hijo de vecina decide andar armado y amedrentar gente. Los vi alejarse de mi coche, vi por dónde salieron, vi hacia dónde se dirigieron... y fui un pendejo porque unos minutos después reaccioné que pude haberme aprendido sus placas, buscarlos por el mundo e ir a partirles tooooooda su madre, hijos de dama de burdel!
